Uno de esos estudios que no dejan de llamarnos la atención y preguntarnos sobre los criterios de asignación de presupuestos para la ciencia , asegura que la historia bíblica de Sulamita (la adolescente que con virginal encanto revive pasión y cuerpo de un anciano moribundo, Salomón) tiene mucho de verdad: a más joven la pareja femenina, más longevo el hombre.
El estudio realizado por el Instituto Max Planck va más allá en su propuesto de un método para ampliar la media de vida masculina (77 años), y desecha métodos como evitar los analgésicos, comer cinco manzanas al día o lavarse los dientes con la mano derecha. No: lo que hay que hacer es tener relaciones todos los días con una mujer, por lo menos, 15 años más joven. A cambio, el galán otoñal disfrutará de 15 años más de vida y de un 20% de posibilidades de morir.
El Instituto Max Planck no precisa el método de investigación aplicado, ni acuatos ancianos se hizo más felices en el proceso.
Fuente | The Times of India
