A solas: Siéntate cómodamente, en silencio, y piensa en una persona. Visualiza su cara y siente que le deseas lo mejor, que su familia y sus amigos la amen, cuiden y mimen. Envíale tu amor. Si no puedes meditar pensando en la persona con la que estás enfadada, empieza pensando en otra. Finalmente podrás hacerlo con cualquiera.
Con otra persona: Siéntate frente a ella, en silencio, y mírala a los ojos. Al principio te costará, pestañearás, quizás te dará risa. Cerrad los ojos y visualizaos. Practica el amor y la ternura hacia ella. Abrid los ojos. Consecuencias: Cuando vayas por la calle y te cruces con alguien, mirarás su cara y sentirás amor. Cuando te enfades, mira la cara de esa persona: te resultará más fácil sentir amor. Y el amor destruye el enfado.