Quizás al principio de la relación te gusta que tu chico se, poco celosillo, que te quiera sólo para él, pero ¡cuidado!, los celos pueden llevar a pique tu relación amorosa. Tanto la envidia como los celos te convierten en una persona difícil de tratar y, paradójicamente, te distancian de lo que quieres atraer.
La pregunta de hoy es: Una persona celosa ¿Nace o se hace? ¿Cuándo debo com
enzar a preocuparme por los celos excesivos de mi pareja? Esto nos dicen los especialistas sobre el tema:
Los celos tienen un componente genético y otro social. Es decir, el ser humano —al igual que sus familiares más directos, los primates— ha ido desarrollando los celos como un mecanismo de defensa para proteger lo que es suyo, en este caso, para conservar a la pareja. Pero tam
bién surgen como consecuencia de la educación recibida durante los primeros años de nuestras vidas y del ambiente social en que hemos crecido. Así, los niños superprotegidos o faltos de cariño presentarán una personalidad más celosa y reservada que aquellos que se sientan seguros de sí mismos y queridos por sus padres, profesores y amigos.
Las personas con celos patológicos vuelven controladores, agresivos e irrascibles. Si tu pareja comienza a hacer preguntas, a seguirte por la controlar tu teléfono móvil y a tela de juicio tus explicaciones ponte en guardia. Seguramente lo estará pasando muy mal, pero, además, puede convertir tu vida y vuestra relación en infierno.