Si siempre se realiza lo mismo, aunque los resultados sean positivos, la energía sexual pierde estimulación. Idea disparador: transformarse sin que sea estresante, incorporando lugares, posturas o juguetes que para los dos sean agradables y que los dejen divertirse y comunicarse.
Solución:
En casa, reduzca el tiempo de chat, de teléfono y de TV: si no es una actividad compartida, la energía sexual queda suspendida en ese mar de estímulos que hacen poco por la comunicación de pareja.
Reserve un día de la semana, por lo menos, para hacer algo a solas: generar un espacio íntimo para divertirse y sentirse en conexión es vital para incitarse a la intimidad.
No limite el contacto físico sólo para la relación sexual: abrazarse, besarse y sentirse en contacto más allá de los encuentros sexuales es una manera de incentivar a la energía sexual aun cuando por delante queda un largo día de trabajo.
3 signos para chequear:
¿Ha reducido de manera notoria la cantidad de los encuentros sexuales con su pareja?
¿Recuerda algún momento fuera de la rutina que haya compartido con él/ella?
¿Hay ideas sexuales que les quedaron pendientes?