Alcanzar un nivel de independencia adecuado, alejado de la temida dependencia excesiva de la pareja, pero también del individualismo exagerado, es el ideal de cualquier pareja. Sin embargo, a veces resulta dificil hacer un juicio acertado del comportamiento de nuestra pareja o del nuestro propio. Quizás con las características que apunta los especialistas te resulte más fácil:
El individualista irresponsable:
Esta persona no crea un «espacio afectivo» porque sólo piensa en sí misma, por lo que crear una pareja saludable con ella es imposible.
Por ejemplo:
Cuenta sus problemas a su pareja, pero cuando ésta quiere hacer lo mismo, le contesta con: «Tienes que aprender a resolver sola tus problemas».
Normalmente lleva el coche para ir a trabajar, pero un día que su pareja lo necesita, le dice: «Yo no puedo prescindir del coche, vete en metro, y así podrás leer el periódico».
El individualista responsable:
- Promueve las acciones recíprocas, así ninguno de los miembros de la pareja queda anulado.
- Es independiente, pero no evita emociones como la compasión o la empatía.
- Es racional y razonable, manteniendo un sentido de la justicia.
- Siempre busca el acuerdo.
