A continuación veremos que nos dicen la psicóloga Patricia Faur sobre cómo los celos y la desconfianza pueden afectar la relación de pareja e incluso llegar a destruirla y cómo podemos hacer para saber si esas «sospechas» son reales y efectivamente existe una infidelidad.
¿QUÉ SIGNOS HAY PARA QUE UNO EMPIECE A SOSPECHAR REALMENTE?
Y lay sospechas que a veces, no tienen que ver con una infidelidad concreta, sino con esas relaciones en donde el otro es ambiguo y no da seguridad. Es el caso de hombres o mujeres con personalidades seductoras, narcisistas, o a las que les encanta ser el centro de la reunión, ser admirados, y que te dejan en un lugar muy ambiguo cuando están frente a otros. Entonces si bien uno no sabe si el otro engañó o no, lo que te hacen sentir es que podés llegar a ser abandonada por una rival, o que el otro podría llegar a engañarte. Y eso es lo que importa.
¿Y COMO ES VIVIR EN ESTADO DE SOSPECHA PERMANENTE?
Como decimos muchas veces en la terapia, acá no se trata de jugar al detective. Pero yo he tenido pacientes que viven en estado de sospecha continúa y por ahí el otro no las engañó realmente. Pero entonces lo quenos planteamos es que si alguien vive de esa forma, aunque esa sospecha no sea real, igual la relación es patológica. Porque no te puedes relajar y no se pudo construir la confianza en ese vínculo, por determinados motivos. Y en esas relaciones donde tu vives sospechando y en la cuesta floja, las cosas andan mal.